Aviones de papel

Recuerdo que en mi niñez, la gran afición que practicaba en el colegio eran las de los aviones de papel. Mantenía una competición con mis amigos por ver cual diseño lograba volar una mayor distancia, nos pasábamos horas perfeccionando y puliendo los diseños como si fuéramos unos ingenieros aeronáuticos y guardábamos celosamente en nuestros pupitres nuestros prototipos mas secretos.

Pues ahora se puede practicar esta afición sin necesidad de gastar papel (que no está la cosa como para talar más bosques) con este juego podemos diseñar nuestros aviones, elegir el peso del papel, calibrar los alerones, decidir la potencia y elevación del lanzamiento del avión.

Que recuerdos aquellos de mi niñez, que nostalgia, los exámenes, las compañeras que me gustaban, los profesores cafres, las notas de final de curso… ¿nostalgia? ¡y una mi…!.

Crítica: 300

Oda al sacrificio y la testosterona.

300 recrea de un modo bastante libre la Batalla de las Termópilas, el enfrentamiento del inmenso ejército persa del rey Jerjes I contra el exiguo grupo de soldados espartanos del rey Leonidas I, de apenas 300 hoplitas, pero hombres con una preparación para la guerra sin parangón, seleccionados desde el mismo momento de su nacimiento y preparados para la guerra.

La película, inspirada en el comic homónimo de Frank Miller, es una muy fiel adaptación del mismo, de hecho, muchos de los planos son calcados a las viñetas del comic.

Técnicamente es muy buena y supera con creces a otras películas que han utilizado la técnica del croma para recrear las escenarios, en esta apenas se notan y los efectos digitales son muy elaborados. Las secuencias de los enfrentamientos son lo mejor de la película, una trepidante y violenta coreografía que te deja con la boca abierta. Su ritmo es frenético aunque de repente tiene el fallo de frenártelo en seco poniéndonos escenas de las conspiraciones y traiciones que suceden en la capital de Esparta mientras el ejército esta luchando. Unas secuencias que a mi me sobraban del todo y no venían a cuento en la trama, solo sirven para cortar el rollo.

300 es puro cine de evasión, no busquen realismo ni comprensión en esta película, ya que esta mucho mas próxima al arte pictórico que al documental. Les recomiendo que vayan a verla sin prejuicios, con la mente limpia y se dejen hipnotizar por las poderosas imágenes de 300.

Le doy un 6 sobre 7

La moto de Dr. House en eBay

La cadena de televisón Fox que produce la serie, junto con la revista americana TV Guide, han puesto en subasta la moto, la Honda CBR Fireblade, que el Dr. House monta en la serie, firmada por Hugh Laurie, el actor que interpreta al famoso doctor. La subasta se realiza por eBay, asi que se puede pujar desde casa.

Pues si eres un mitómano, fan de la serie, te gustan las motos y te sobra el dinero, esta es tu oportunidad. Tambien añadir que es por un buen motivo ya que el dinero recaudado se destinará a la Cruz Roja.

El artista del viento

Vollis Simpson es mecánico jubilado de 87 años con una pasión por los molinos de viento. Para Vollis Simpson, los molinos de viento suponen una solución práctica a los problemas diarios. Sirviendo en Saipan en las islas de Mariana durante la Segunda Guerra Mundial, Simpson construyó un molino de viento para accionar una lavadora. Años mas tarde, construyó un molino para accionar un sistema de calefacción para su casa. En 1985, Simpson comenzó a hacer molinos de viento en su granja con piezas desechadas de la máquinaria con la que trabajaba en su granja simplemente para ver cómo se moverían con el viento. Su colección de curiosos molinos de viento en su granja de Lucama, Nort Carolina, hasciende a la docena. Enormes y excéntricas esculturas cinéticas construidas con chatarra industrial. Todo un artista del viento este Vollis.

El arte llevado al videojuego

Viendo las imágenes de Little Big Planet uno no busca motivos para comprarse una Playstation 3, sino se pregunta de donde saco la pasta.

¿Alguien me presta 600 euros?.

Odisea tóxica

Algunos días es mejor no levantarse de la cama. Uno de esos días que emprendes proyectos henchidos de optimismo y sin uno esperarlo el cosmos, la vida, la serialidad o lo que coño quiera que sea, te mete tres puñetazos en el estómago que te dejan tirado en el suelo y sin aliento. Algo de eso nos ocurrió el sábado.

Mr. Condor, Mr. Alberto, Mr. Mario y un servidor acordamos emprender una mañana de sano y entretenido senderismo por los hermosos paisajes de nuestra isla. La ruta nos llevaba desde Santa Brígida al Campus Universitario en Tafira recorriendo el barranco de Guiniguada.

El punto de encuentro era la estación de guaguas (autobús para los godos) del parque San Telmo, cuando llegué allí comencé a ver cosas raras, gente joven disfrazados de forma extraña, me preguntaba que era aquel aquelarre cuando el Sr. Condor dio respuesta a mis preguntas, se organizaba en Santa Lucia el primer Salón del Manga, así que lo que tenia ante mi era parte de esa tribu urbana denominada otakus (frikis en japonés) Habia gente disfrazados de personajes de series como Naruto, Sailor Moon, Saint Seiya, ect, ect. Entre tanto manga friki comenzamos a sentirnos unos bichos raros con nuestras gorras, mochilas y botas, así que nos inventamos que íbamos disfrazados de un manga que improvisamos de unos senderistas amantes de la naturaleza que luchan contra los demonios que quieren destruirla con los poderes que nos donó la madre Gaia.

En la estación las cosas comenzaron a torcerse, quizás era una señal para no continuar, pero nuestra terquedad y estupidez no nos permitió ver las advertencias. El primer problema: al Sr. Condor se le olvidaron en la casa las fichas de la ruta de la caminata, raudo se dirigió a su domicilio mientras que los demás le esperamos allí hasta que volvió justo a tiempo para coger la guagua.

Cuando llegamos a Santa Brígida el clima estaba húmedo y las lluvias eran intermitentes, el encontrarnos con barro en nuestro recorrido era mas que una certeza, era un axioma ineludible y eso produjo el segundo de los problemas del día: el Sr. Alberto no llevaba el calzado adecuado. Tenía unas zapatillas que mas parecían unas babuchas con cordones. El problema tuvo una fácil pero cara solución, se compró un calzado mucho mas adecuado en una zapatería del pueblo, un par de gruesas botas que le salieron por unos 80€, casi nada.

Emprendimos nuestra bucólica aventura descendiendo al barranco, una vez abajo el Sr. Condor nos comunicó que en un punto concreto del trayecto debíamos tomar un desvió a la derecha, pero ninguno se acordó de ese punto hasta que era demasiado tarde, así que seguimos internándonos por una senda que nos llevaría a la que después descubrimos que era la parte NEFASTA del barranco. Un camino tortuoso con sitios verdaderamente difíciles de atravesar y con un rió de aguas fecales que nos despertaba el sentido del olfato a olores realmente repugnantes, algunos sufrimos de arcadas y el Sr. Alberto que iba comiéndose un bocadillo lo tubo que tirar de las fatigas que le entraron. A mitad del camino nos detuvimos para averiguar en donde coño estábamos en ese momento y cometí el error de apoyar mi peso en la endeble caña que había cogido para ayudarme como bastón, cuando esta cedió rompiendose y provocando que perdiera equilibrio, el tobillo izquierdo se me dobló levemente, en ese momento no sentí ningún dolor, y pensé “¡Buf! del esguince que me libré”. Continuamos la marcha por el barranco hacia alguna parte ya que si seguíamos caminado en algún momento llegaríamos a algún lugar, ¿o no?.

A medida que seguíamos caminado el pié fue molestándome cada vez mas, al mismo ritmo que el animo en el grupo iba disminuyendo, el triste paisaje lleno de desechos y el no saber donde estábamos ni cuando iba a terminar aquello comenzó a despertarnos el deseo de finalizar aquello de alguna forma honrosa pero breve. Un tiempo después de comernos nuestros sendos bocatas en uno de los lugares menos sucios que habíamos encontrado llegamos a una carretera, con una señal de que por allí pasaban guaguas, ergo, podríamos coger una que nos sacara de aquel lugar, pero aquella señal no tenía horarios de cuando pasaban las guagas. En ese momento el pié me dolía bastante y mi cojera era mas que evidente así que alli nos quedamos con la esperanza de que pasara la guagua, pero en una carretera perdida como aquella teníamos serias dudas que de el transporte público por allí fuera frecuente.

Tirados en aquella esquina, sucios, cansados, lastimados, decepcionados esperamos un largo tiempo hasta que vimos salir de una casa cercana un coche conducido por una dama de excelso corazón, el Sr. Mario se acercó a preguntarle si sabia cuanto tardaría en pasar por allí otra guagua y nos respondió que tardaría bastante y se ofreció a llevarnos en su coche (¡Bendita sea!) a otra parada en la que tendríamos mas posibilidades de coger un transporte que nos llevara de vuelta a la estación, debió de rompérsele el corazón al ver nuestro aspecto mas propio de unos huerfanitos salidos de una obra de Dickens que de unos hombres hechos y derechos.

El resto de nuestra aventura nos la pasamos en aquella parada repasando el mapa y preguntándonos en donde cojones nos habíamos equivocado. Cuando llegamos a Las Palmas el pié me dolía horrorosamente, así que pasé por el servicio de urgencias antes de ir por mi casa y como buen hipocondríaco temiéndome lo peor. Después de un breve examen me diagnosticaron una “Metafornalgia” no se si lo he escrito bien pero no he encontrado ninguna referencia en Internet, al final era solo una inflamación de los ligamentos del pié, me inyectaron un anti inflamatorio y para casa.

24 horas después afortunadamente el pié apenas me molesta así que estoy feliz leyendo las reivindicaciones por internet del Sr. Condor de repetir la ruta pero esta vez haciéndolo bien (se toma estas cosas como una cuestión de honor). Y la verdad es que estoy tentándome, debo de tener un pequeño masoquista dentro.

Por cierto, las fotos que ilustran este artículo son gentileza del Sr. Alberto.

El correo tradicional se pone friki

Adaptarse o morir, esa es quizás la premisa por la que han decidido sacar unos buzones de correos de los más friki, donde cada vez la tradicional carta va siendo sustituida por el correo electrónico, pues a partir de ahora no se sorprendan si tienen que depositar las cartas dentro de la carcasa de R2-D2.

Tron

¿Se acuerdan de la película Tron? Si, ya se que nadie va a reconocer que se acuerdan de esa película, me pasa lo mismo que a ustedes me avergüenza admitir que vi esa ridiculez, pero fue una peli pionera en los FX digitales. Hay una escena de una carrera de motos difícil de olvidar, en esa peculiar carrera dos motoristas digitales competían en una carrera a muerte, ambas motos dejaban en su recorrido un muro de luz y el objetivo era atrapar a tu rival y no dejarle otra opción que estrellarse.

Pues en este juego recrean la misma competición. Venga, ya pueden perder media hora de su vida.

Animusic

Muerte súbita

¿Qué sucede cuando un actor esta hasta los cojones, en este caso hasta lo ovarios, de hacer siempre lo mismo?.



Te comprendo perfectamente Belén, a mi también me entran ganas de que me maten cuando veo tu serie.

Actualización. Al parecer esta escena que les había colgado aquí arriba de esta lamentable serie es un plagio de un capítulo de la serie Angel. Otro plagio mas de los guionistas que con el más absoluto descaro se han dedicado a calcar escenas de obras de Neil Simon y una interminable retahíla de películas y series, la lista es enorme tan grande como la falta de talento y la escasez de vergüenza de los realizadores de esta serie. Vean la escena y comparen.

Noche de eclipse lunar

Magnifica y destacable noche de observación astronómica en la cumbre de Gran Canaria. Lastima que algunos destacados miembros del comando friki no pudieran estar presentes esa noche para presenciar el espectáculo, pero alguno tenia una buena excusa. No obstante, los que estábamos presentes disfrutamos de un asombroso fenómeno que no se repetirá hasta dentro de 22 años. ¿Qué excusa pondrán entonces? ¿El alumbramiento de la nieta?.

Memorable Quote V

Hijo, si quieres obtener algo en esta vida debes luchar por ello, y ahora cállate, están diciendo los números de la lotería.

Homer J. Simpson

Crítica: The host

En el cartel de la película destaca una frase extraida de la revista Variety en la que dicen sobre la película: “La mejor película con monstruo hasta la fecha” eso es algo fácil dentro de un genero tan denostado como el de películas con monstruo en las que se han hecho verdaderas aberraciones cinematográficas pero en el que también podemos encontrar auténticas obras de arte como: Tiburón, Alien y su secuela Aliens o el clásico Frankenstein que superan y con creces a esta que dice ser “La mejor película con monstruo hasta la fecha” afirmación con la que no estoy en absoluto de acuerdo.

Les aconsejo que no se dejen engañar por la maliciosa publicidad porque “The host” es una película de suspense atípica, de hecho, diría que el suspense en esta película es muy escaso. El director Joon-ho Bong usa un torpe, estúpido y hambriento monstruo para aterrorizar a un Seúl desprevenido y para sacar a la luz a los verdaderos monstruos de esta historia que no son otros que los ineptos y corruptos políticos y funcionarios que mas que ayudar solo buscan sacar partido a la situación. Igualmente atípicos son los héroes de esta historia, una modesta familia que buscan a la miembro más joven secuestrada por el monstruo, quizás lo mejor de esta película sean los personajes que componen a esta familia y el modo en que llevan su desesperada búsqueda.

El ritmo de la película es bueno, pocas veces decae y hay algunas escenas muy buenas, pero no puedo dejar de pensar que me han dado gato por liebre, seguramente no sea culpa de la película sino del marketing. Quizás si me la hubieran vendido como lo que es, que no es otra cosa mas que una película de denuncia social, me hubiera llevado una impresión mucho mas grata.

Le doy un 5 sobre 7.

Adastra ya tiene su adastrita

Mi más sincera enhorabuena a Noli y a Pablo por la pequeña Claudia.